Hablar del sector de la logística es hacerlo, en buena medida, de medios de transporte. Una cosa conduce a la otra de un modo inexorable. La logística no sería eficaz si no lo fueran los medios de transporte que se relacionan de un modo directo con ella y que, por regla general, suelen ser camiones o furgonetas. Pero cualquier vehículo puede ser de utilidad a la hora de cumplir con una labor logística. Solo es necesario saber qué ventajas y qué inconvenientes presenta cada uno de ellos.
Por otra parte se encuentran las instalaciones de las que una empresa dispone para tratar de almacenar todos sus productos. Esta labor es clave puesto que se trata del punto de partida de toda cadena de suministro. Es, además, un factor elemental a la hora de garantizar y de hacer posible una productividad sin la cual no se puede conseguir una eficiencia ni en el trabajo ni en los beneficios a los que una compañía es capaz de llegar. Sin unos almacenes perfectamente organizados y sin medios de transporte eficientes, las empresas españolas estarían perdidas.
Son muchos los profesionales que se dedican a labores relacionadas con la logística y el transporte en todo el mundo. Y España no es una excepción a esto. Hay cinco ferias imprescindibles sobre logística y transporte por carretera que se van a celebrar durante este año. El artículo destaca el SIL de Barcelona como una de las elementales, seguida de la Logistics & Distribution Packaging Innovations, el eLogistic Forum 2018 o la Nortrans. En cualquiera de ellas se pueden adquirir nociones de primer nivel para desenvolverse en el sector.
¿Qué papel juega el automóvil en todo este proceso logístico del que venimos hablando? Lo cierto es que su papel es imprescindible puesto que, de acuerdo a los datos que dio a conocer la Fundación Orange en marzo del año pasado, es el automóvil el que lidera la transformación digital del transporte y de la logística, una labor importante y que es necesaria para que el sector evolucione hacia la modernidad y sea capaz de satisfacer todas las necesidades de los clientes.
La verdad es que los medios de transporte han jugado una importancia elemental en todo lo relativo al sector de la logística. Una cosa no se entiende sin la otra. Sería inútil conseguir una eficiencia en el almacenaje si no dispusiésemos de medios efectivos y productivos de transporte. Sería igualmente inútil disponer del mejor y más rápido medio de transporte si no fuéramos capaces de almacenar de un modo eficaz nuestros productos en un lugar. Los profesionales de Stock Alpha ya lo han advertido en varias ocasiones: la logística y el transporte son, a día de hoy, más interdependientes que nunca.
El ecommerce está poniendo a prueba al sector
El comercio electrónico es un reto extraordinario para los sectores de la logística y el transporte. El tiempo que transcurre desde que un cliente pide un determinado producto hasta que lo recibe está siendo reducido de un modo impresionante. En algunos casos, entre un momento y otro apenas transcurren 30 minutos. Eso es un verdadero desafío logístico y de transporte y es por eso por lo que el ecommerce está transformando a estos dos sectores tal y como los conocíamos hace apenas unos años. Ser capaces de adaptarse a ello es sinónimo de éxito.
Y eso que todavía el comercio electrónico se encuentra en una fase inicial. En cuanto este fenómeno se termine de convertir en habitual, seguramente las empresas tendrán que cambiar todas sus estructuras logísticas y sus departamentos para tratar de adaptarse a ese nuevo cambio. Desde luego, ese es un reto que preocupa a las empresas de hoy en día y al que hay que hacer frente con una inversión que no deje lugar a ninguna duda. Hay que apostar por esto y hay que hacerlo desde ya.
El futuro es de Internet y del ecommerce. Es precisamente por eso por lo que es de una innegable utilidad comenzar a preparar las estructuras para lo que se avecina. No todas las empresas tienen la capacidad de distribuir sus productos en media hora. Pero ese es el objetivo hacia el que todos tenemos que tender. En ello están las grandes y medianas empresas españolas. Si son capaces de adaptarse a este nuevo campo, la productividad será una rutina en el futuro. Y, para ello, seguirán necesitando la inestimable ayuda del mejor aliado en estos casos: un buen vehículo.