Si no estás acostumbrado o acostumbrada a viajar, o no coges mucho el coche y, de pronto, te ves obligado a hacer un viaje largo por carretera, es posible que te pongas muy nervioso o temas que algo malo pueda ocurrir. El miedo al volante es más frecuente de lo que creemos. De hecho, hay hasta una palabra para definirlo: la amaxofobia, que, según la RAE, es la “fobia a conducir un vehículo o viajar en él”.
Es importante que entiendas por qué te ocurre. Los motivos más frecuentes suelen ser la falta de experiencia; el miedo a sufrir un accidente ya sea porque has conocido la experiencia en primera persona o porque alguien cercano a ti lo ha hecho; o los trastornos mentales como la ansiedad, el estrés o la depresión entre otros. En el primero de los casos, si tienes falta de experiencia, debes practicar en tramos cortos o por zonas conocidas hasta que te sientas más desenvuelta. Empieza poco a poco y, a medida que veas avances, explora otros lugares. Al principio puedes pedirle a algún familiar con experiencia que te acompañe en el sitio del copiloto, pero no te acostumbres ya que es importante que te sientas segura tú sola. Si sientes que llevas demasiado tiempo sin coger el coche, y que ya no te acuerdas bien de las cosas más básicas, debes ir a una autoescuela y contratar prácticas de nuevo. Los profesores te ayudarán a mejorar y a perderle el miedo a ir al volante. Si lo que te ocurre es que has vivido alguna experiencia traumática, o que padeces algún trastorno, lo mejor es que acudes a un especialista de la psicología para que te facilite las herramientas necesarias para tratar tu caso concreto.
Si por fin te has atrevido a conducir un coche y debes enfrentarte a tu primer viaje largo por carretera, aquí te facilitamos algunos consejos para que todo salga según lo previsto.
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Haz una revisión
Es muy importante que el coche no te ninguna sorpresa relacionada con el mantenimiento. Si conoces las fechas de tu viaje con antelación, te recomendamos que vayas a pasarle la revisión integral con tiempo, de manera que te dé un margen para reemplazar o arreglar todo lo que haga falta. Si ha sido algo más improvisado, puedes acudir igualmente a un taller para que eche un vistazo más general. Presta especial atención al aire de las ruedas, el aceite, el líquido de frenos, la batería o el limpiaparabrisas.
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Relájate el día anterior
Si vas a hacer un viaje largo, necesitarás estar descansado. Recomendamos que no hagas grandes esfuerzos y te acuestes pronto. No vayas a cenar fuera y, mucho menos, salgas de fiesta. El consumo de alcohol al volante está totalmente prohibido, y beber el día anterior también es muy desaconsejable ya que la resaca también puede provocar nervios y ansiedad.
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Infórmate bien sobre la ruta
Una de las cosas que más nervios provocan a la hora de conducir, es perderse o no saber qué ruta tomar. Además de configurar el GPS para que te guíe durante el trayecto, es importante que te tomes un tiempo para familiarizarte con el mapa e informarte acerca del estado de las carreteras o los desvíos que tengas que realizar. Asimismo, también es muy recomendable mirar el tiempo. Si consideras que la meteorología puede ser peligrosa y, además, ya tienes miedo a coger el coche normalmente, lo mejor es que canceles el viaje o busques otras opciones como el autobús, el tren o algún servicio de compartir coche.
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Prepara una lista de reproducción musical
En trayectos largos, es frecuente hacer tramos monótonos por una misma vía que pueden llegar a hacerse aburridos. En estos casos, en lugar de sobre pensar o alimentar tus miedos, lo mejor es que tengas preparada una buena lista de reproducción musical o un podcast que te resulte interesante. Aunque la radio es la opción más clásica, es frecuente que, al cambiar de provincia, o de país, las emisoras se pierdan y tengas que buscarlas. Esto puede distraerte o aumentar tus niveles de estrés, así que lo mejor es que conectes tu teléfono móvil o pongas tu propia música. Si tu coche no tiene esta posibilidad, debes saber que es posible adaptarlo y personalidad el equipo de sonido. Los expertos de Car Light Garage nos dicen que un buen equipo musical para el vehículo puede marcar la diferencia en un viaje largo o para aquellos que pasan el día en el coche.
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Haz descansos
El descanso es imprescindible. La DGT recomienda hacer una parada de aproximadamente veinte minutos cada dos horas o 150-200 km. Puedes aprovechar para tomar un refrigerio en alguna estación de servicio o para despejarte y estirar las piernas. Si viajas con alguien más, también puedes hacer turnos con esa persona.
¡Mucha suerte con tu viaje! Seguro que todo sale bien.